Por | 01/09/2015| 0 comentarios

Las necesidades informáticas casi diarias de muchas empresas derivan en que su equipo directivo se plantee contratar a un profesional que dé solución a las incidencias que se puedan presentar. Pero, ¿hasta qué punto es rentable tener un informático en plantilla? ¿Es mejor externalizar este servicio?

Sinceramente dependerá del volumen de trabajo y de la importancia mayor o menor que tengan los equipos informáticos en la productividad de la empresa. Aquellas que tengan un volumen de trabajadores amplio –supere la cifra de 20 empleados o más- y el 70-80% de su rendimiento se deba a un correcto funcionamiento de toda la infraestructura informática, quizás sí que sea recomendable y hasta rentable contratar a un informático que esté a diario reparando y/o solucionando los problemas que se puedan presentar.

Ahora bien, para la mayoría de pequeñas y medianas empresas (pymes), la mejor opción es recurrir al outsourcing o contratación externa. ¿Por qué? Desde CODETIA te damos las respuestas.

  • Equipo constantemente cualificado: El ritmo imparable y vertiginoso de la tecnología también recae sobre el ámbito de la informática. Con un proveedor externo, su personal siempre estará formado en los últimos avances, soluciones de software y hardware, redes, etc. para dar respuesta inmediata a cualquier necesidad que pueda plantearse. Un informático en plantilla también lo podrá hacer, pero es cierto que no tendrá la oportunidad de entablar las mismas sinergias que se establecen entre los trabajadores que pertenecen a una empresa proveedora.
  • Servicio continuo:  Teniendo a un proveedor externo que solucione las incidencias evitará cualquier contratiempo que puedas encontrarte con la persona contratada: baja imprevista, vacaciones, horarios de trabajo o turnos a realizar fuera de lo marcado por convenio, etc…
  • Transformación en coste variable: Un trabajador en plantilla siempre redunda en un coste fijo al mes y al año independientemente del resultado y servicio prestado. Con la externalización del soporte informático se convertirá de inmediato en un coste variable que, aunque deberá controlarse dentro de una partida presupuestaria para que no hayan desviamientos importantes, siempre encontrará la mejor solución.
  • Eliminación de tiempos no productivos: Con el outsourcing informático no se tendrá que pagar a un empleado las horas muertas en las que no ha tenido prácticamente participación. El proveedor externo sólo facturará en función de las horas que ha pasado prestando su servicio. O como en el caso del soporte informático de CODETIA el coste de la tarifa plana acordada.

Las pequeñas y medianas empresas se están dando cuenta de las ventajas que supone externalizar muchos servicios. Cada vez más se recurre a profesionales de fuera para acometer diferentes tareas, no sólo informáticas, sino de cualquier otro ámbito. De hecho, está demostrado que en muchos casos se puede ahorrar más de un 50% de los costes.

El equipo de codetia.com